Manejo automáticoEl hombre o la máquina - ¿quién gobierna mejor? Incluso si cree conocer ya la respuesta, leyendo esta recopilación de material seguro que ha encontrado más de una información que no conocía. ¿O ya sabía que sólo un piloto de viento mecánico gobierna la embarcación permanentemente pero que un piloto automático, por el contrario, funciona sólo con pausas de gobierno? Esta recopilación de material enumera las ventajas y las desventajas de los pilotos automáticos y de los pilotos de viento, hace patente el modo de funcionamiento de los pilotos de viento y describe el por qué las tres variantes, piloto de viento, piloto automático y el hombre son tan importantes a bordo de un yate de alta mar. |
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Manejo automático a vela¿El hombre o la máquina? El hombre, como mínimo el navegador, es un autómata genial cuando sostiene en la mano el timón de un barco! Puede interpretar rápidamente gran número de señales y así mantener un barco en rumbo. Sus sentidos interpretan informaciones que van desde el ángulo aparente de incidencia del viento, el rumbo del compás, la posición de las velas, la situación de las olas y de las nubes o la posición inclinada del barco, la presión del timón, los datos de navegación así como el tráfico que se acerca en contra, y todo ello lo hace de una manera tan perfecta como ningún otro autómata sería capaz de hacerlo. Pero la capacidad de rendimiento humana llega a sus límites cuando el cansancio o la inexperiencia influyen en el resultado de gobierno: ¡cuando no se pueden mantener los ojos abiertos, se hace peligroso navegar! El desarrollo de dispositivos de manejo automático fue un camino lógico con la meta de conseguir una navegación cómoda y viajes más largos. Los pilotos de viento eran hace unos 30 años casi la única característica por la que se reconocían los veleros de alta mar. Por el contrario, los pilotos automáticos se ganaron el mercado por otro lado, por el lado del navegador normal que deseaba libertad de gobierno para sus viajes de vacaciones o de fin de semana. El uso de pilotos automáticos en el ámbito de la navegación en alta mar era por aquel entonces casi tan inimaginable como el uso de aparatosos pilotos de viento para un viaje desde Kiel a Marstall. Ambos sistemas tenían su clientela definida. La eterna guerra dogmática de pilotos automáticos contra pilotos de viento, que en muchos círculos hacía inflamar los ánimos, ya no existe en la actualidad, por un lado gracias al enorme desarrollo de ambos sistemas y por otro lado gracias al mayor conocimiento de los navegadores. Las fronteras se han desdibujado y a continuación debe analizarse qué opciones ofrecen cada uno de los tres sistemas para gobernar un barco, siempre teniendo en cuenta que la medida de todas las cosas debe ser el timonero humano, puesto que es en función de su rendimiento donde se verán más claros los contrastes respecto a un piloto automático. Hombre, piloto automático, piloto de viento¡En idioma informático, un yate de vela es un sistema inestable! ¡Sin acción / reacción en el timón principal siempre perderá el rumbo! Dependiendo de la construcción, siempre se tiende a tener un timón de sotavento para mantener un curso teórico. Un barco que tiende a sotavento casi nunca podrá gobernarse perfectamente. La fuerza necesaria para mantener el rumbo es muy pequeña o muy grande. Dependiendo de la capacidad de rendimiento del timonero, el barco acabará más tarde o más temprano perdiendo el rumbo cuando se superen los límites, sin importar de qué tipo éstos sean. Pilotos automáticosEl peor enemigo de todos los pilotos automáticos es la batería de a bordo y su capacidad. El consumo de energía debe ser preferiblemente bajo, lo que sólo puede conseguirse cuando un refinado software calcula el rumbo con compás, las desviaciones del rumbo, los movimientos del barco y provoca el impulso de contratimón necesario en un ángulo reducido, con fuerza y el menor número de veces posible. Los pilotos automáticos se dividen en dos categorías: Pilotos de cockpit, que se montan directamente en la caña o en la rueda de gobierno, que poseen un compás interno o externo y que están limitados en cuanto a su fuerza y a su rendimiento. Los motores eléctricos usados para este ámbito de función han sido diseñados para un reducido consumo de energía y aportan su fuerza mediante una múltiple reducción, lo que por fuerza significa una velocidad de trabajo menor. Pilotos de montaje, que inciden directamente en los cuadrantes del timón, han sido diseñados para cargas mayores y consumen mucha más energía. Dependiendo del sistema de timón principal existente se utilizan bielas de avance mecánicas o hidráulicas. Ambos tipos de pilotos automáticos pueden conectarse entre sí como módulos de sistemas de navegación ya existentes, cuando por ej. debe mantenerse un curso determinado en la punta de ruta de navegación. Los números de consumo de energía en ampere por hora pueden parecer de por sí mínimos, pero en un período de tiempo de 24 horas, el número resultante asusta. Y es evidente que durante un viaje largo es inevitable hacer un balance de la energía, puesto que ésta debe ser creada allí donde se consume: A BORDO. Los límites de un piloto automático se alcanzan cuando se ponen en él falsas "esperanzas": el gobierno de acuerdo con el viento aparente a través de un señalizador de banderola nunca será aceptable, porque en este caso deberán calcularse demasiadas influencias perturbadoras. Los movimientos de balanceo y de cabeceo que traen consigo una modificación del ángulo aparente de incidencia del viento deben calcularse en su señal verdadera, restándoles los movimientos superfluos. En condiciones de mal tiempo creciente, un piloto automático, con su comportamiento de contratimón siempre regular, apenas podrá dominar la situación. Y no existe un piloto automático con cambio de marchas ni distintos grados de fuerza. El único transmisor de señal fiable en un piloto automático será siempre el compás, y es por ello que casi todos los fabricantes han profundizado su desarrollo en esta dirección y ofrecen cada vez más los denominados giro-compases como opción, cuando un compás normal de saturación ya no parece ser suficiente. Respecto a las verdaderas condiciones a bordo de un yate de vela, es decir a la navegación de acuerdo con el ángulo aparente de incidencia del viento, cualquier piloto automático estará mal equipado en tal situación, puesto que ¿de qué sirve un mareaje de compás, si las velas están en facha? Las características principales de estos autómatas son su construcción compacta, su montaje fácil, su fácil manejo, la invisibilidad y, respecto a los pilotos de cockpit, su económico precio. Su poca fiabilidad técnica en algunas ocasiones es el compromiso que debe aceptarse. Dependiendo del ámbito de utilización del barco se puede vivir con este compromiso o se debe prevenir adquiriendo piezas de reserva / equipos u otros sistemas de manejo automático. |
Pilotos de vientoEn los últimos 30 años han existido unos 12 tipos distintos de pilotos de viento. El mercado actual diferencia básicamente 3 tipos de sistemas: Sistemas de timón auxiliar, en los que la banderola no sólo debe dar el impulso de gobierno sino también la fuerza para girar un timón auxiliar, debido a lo cual las banderolas de estos sistemas deben ser de grandes dimensiones. El timón principal se utiliza para el calibrado de precisión y a continuación es bloqueado. Puesto que en estos sistemas no existe un apoyo de servo-fuerza, el límite de la aplicación completa se encuentra entre los 10 - 12 m. Sistemas de timón oscilante, cuyo eje de timón se desplaza lateralmente (oscila), dependiendo de la señal de la banderola y de la posición del timón. Las servo-fuerzas aquí suelen ser suficientes para gobernar con seguridad el timón principal de embarcaciones de hasta 30 t. Condición indispensable para ello es una buena transmisión de cabos al timón principal. El gobierno por caña será aquí el caso ideal, los sistemas de gobierno por rueda empeoran la transmisión de fuerza o pueden incluso hacerla imposible. Como peor sea la transmisión de fuerza, más rápido perderá el barco su rumbo. Sistemas de timón doble, en los cuales la señal de la banderola activa un timón oscilante y éste hace girar un timón auxiliar con fuerza ampliada. Puesto que es independiente del timón principal, este sistema está predestinado a grandes yates con cockpit central, los yates con los que en la actualidad se navega en alta mar. Ventajas y desventajas de las tres opciones Hombre : Piloto automático: Piloto de viento: Síntesis: Como resultado de este estudio ha quedado claro: ¥ el piloto de viento para la navegación con viento, |
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Piloto automático contra piloto de vientoVentajas del piloto automático Invisible Desventajas del piloto automático El mareaje según compás no es ideal navegando a vela Ventajas del piloto de viento Gobierna el mareaje con el viento Desventajas del piloto de viento ¥ no trabaja con calma |
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